La ciudad de Barcelona es emoción, arquitectura, gastronomía, diversión ¿y qué más decir?, descubrir una cultura de la que enamorarse al caminar entre sus calles y sus gentes.

Conocer una ciudad tan grande como Barcelona en 4 días puede parecer complicado, por eso, os hemos creado una ruta de cuatro días en Barcelona para que disfrutéis de una maravillosa escapada y no os perdáis ni un solo detalle de lo mejorcito de la ciudad.

En este artículo de ShBarcelona os vamos a dar los mejores consejos para exprimir la ciudad cada segundo tanto en verano como en invierno. 

Día 1: Ruta histórica por la Ciutat Vella

• Las Ramblas
• Liceu
• Museo Erótico
• Santa María del Pi
• Catedral de Barcelona
• Plaça Sant Jaume
• Mercat de la Boqueria
• Mirador de Colón
• Rambla de Mar
• Centro Comercial Maremagnum
• El barrio de La Barceloneta

Por la mañana 

Empieza la ruta de 4 días en Barcelona por su casco antiguo. La primer parada del viaje es en en Plaça Catalunya, centro neurálgico de la Ciutat Vella y de Barcelona. 

Hasta aquí llegas fácilmente con la línea L1 o la L3 del metro, directo a las famosas Ramblas de Barcelona.

En esta misma calle te encuentras con dos piezas muy dispares de la cultura catalana. 

El Liceu, la gran ópera de Barcelona, que forma parte del circuito operístico europeo.

Cruzando La Rambla, te encuentras con el Museo Erótico de Barcelona, que enseguida reconocerás por la presencia de una actriz caraterizada a lo Marilyn Monroe con una de las escenas más emblemáticas de la película La tentación vive arriba.

En la misma Rambla, en el número 51-59, justo al lado de El Liceu, puedes deleitarte en una de las heladerías más especiales de Barcelona el Rocambolesc de los Hermanos Roca.

Dando un breve paseo, toma la calle Cardenal Casañas que cruza La Rambla. A tan solo 400 metros llegarás a la Plaça del Pi, esta pequeña explanada alberga la impresionante iglesia de Santa Maria del Pi.

Si cuadras bien tu agenda, podrás pasear por la feria gastronómica de productos artesanales. Importante, solo se organiza cada primer y tercer fin de semana del mes.

Selfie del día: Una de las fotografías más emblemáticas de la ciudad es justo al inicio de Les Rambles. Te puedes subir a los pequeños escalones de la farola para tomar una panorámica con la concurrida calle a tus espaldas.

Adéntrate por los enrevesados callejones y rincones del barrio Gótico hasta llegar a la Catedral de Barcelona.

Se puede entrar gratuitamente todos los días laborables de 12:30 h a las 19:15 h y los festivos de 14:00 h. a las 16:45 h.

Desde la Catedral, dirígete hacia el este para llegar hasta la tranquila plaça de Felip Neri, de camino te encontrarás con los dos edificios que simbolizan el poder en Catalunya, enfrentados entre sí en la Plaça Sant Jaume.

El Ayuntamiento de Barcelona, la municipalidad que rige la ciudad de Barcelona y el Palau de la Generalitat de Catalunya, el gobierno de la región catalana.

Dónde comer en el centro de Barcelona

Después de una mañana recorriendo el centro de Barcelona, ahora toca el momento deseado ¿dónde comer en el centro?

La mejor opción, sin lugar a dudas es, el famoso Mercat de la Boqueria, cuando veas la frescura de sus alimentos se te abrirá aún más el apetito. 

Algunas de nuestras recomendaciones son el Quim de la Boqueria, con una amplia oferta gastronómica de marisco y pescado para quedarse boquiabierto.

También, otras dos recomendaciones son el Kiosko Universal, situado en el puesto 691 o el Pinotxo, un clásico indiscutible en este mercado. 

Por la tarde

Tras haber descansado en este icónico mercado municipal, vamos a La Barceloneta.

Un antiguo barrio de pescadores, que aún conserva el encanto de antaño, repleta de historias de piratas y marineros. Percibe el alma de pueblo marinero explorando sus callejuelas secretas. 

Para ello, bajamos por Las Ramblas hacia el Mirador de Colón, cruzamos la Rambla de Mar por la pasarela hasta el centro comercial Maremagnum y en unos 10 minutos a pie llegamos al Port Vell, y al inicio de La Barceloneta.

Os invitamos a pasear entre sus calles estrechas y sumergiros en sus bares y locales, ya que es una zona perfecta para cenar o tomar la última copa.

Selfie del día: desde el punto más alto del Maremagnum tienes una vista al puerto que te dejará impresionado. El atardecer es el momento perfecto para capturar la grandeza de esta ciudad.

Día 2: Ruta por la Barcelona Modernista

• Passeig de Gràcia
• Casa Batlló
• La Pedrera – Casa Milà
• Casa Rocamora
• Casa Lleó i Morera
• Casa Ametller
• La Sagrada Família
• Hospital de Santa Creu i Sant Pau

Por la mañana

En esta segunda ruta nos centramos en la faceta más arquitectónica de la Ciudad Condal y curiosamente, también comienza desde Plaça Catalunya, sólo que esta vez, en dirección norte. 

Para que este paseo nos cunda, necesitas una buena organización, ser puntual y tener listas las entradas de cada uno de los monumentos que visitaremos. 

Dicho esto, nuestra primera parada será la Casa Batlló, un edificio modernista Patrimonio Mundial de la Unesco desde 2005, diseñado por el arquitecto más famoso de Barcelona, Antoni Gaudí. 

La entrada es de fácil acceso, a tan sólo 10 minutos caminando desde Plaça Catalunya y muy céntrico, en la parada de Passeig de Gràcia de las líneas de metro (L1 y L3). Se puede visitar de lunes a domingo de 9:00 a 20:00.

Tras esta visita nos dirigimos a otra obra sublime de Gaudí, la Casa Milà o también conocida como la Pedrera, (cantera en catalán), debido a su sinuosa estructura que recuerda más a una montaña  donde se pica piedra que a un edificio.

Las entradas de este edificio de 108 años, las puedes conseguir en el siguiente enlace de la Casa Milà. 

Un edificio modernista curvilíneo con ventanas de hierro forjado y chimeneas que recuerdan a cascos de soldados es un espectáculo visual que merece la pena ver.

Recupera fuerzas con un vermut tradicional en el Restaurante El Nacional o en Banker’s Bar en el mismo Passeig de Gràcia. 

Además podrás disfrutar de la vista emblemática de algunos edificios como la Casa Rocamora, la Casa Lleó i Morera o la Casa Amatller y aunque las dos primeras no son visitables, su presencia destaca por encima de otros edificios.

Selfie del día: Colócate en las escaleras de la terraza de la Casa Milà, así te podrás hacer la foto junto a las peculiares chimeneas.

Dónde comer cerca de la Sagrada Família 

Tras quedar maravillado con estas visitas, recomendamos una parada técnica para comer, relajarse y asimilar la belleza arquitectónica que acabamos de ver antes de seguir con la ruta hacia el plato fuerte del día, la Sagrada Família. 

Puedes caminar unos 20 minutos hacia el norte hasta La Sagrada Família o si prefieres ir en metro, camina 2 minutos hasta llegar al metro L5 en Diagonal, y en dos estaciones llegas a la parada de La Sagrada Família. 

Una vez te bajes del metro, ve a la salida de Avenida Gaudí, un bulevard repleto de restaurantes y bares aptos para todos los gustos culinarios. 

Nuestras recomendaciones son; La Paradeta, una delicia para los amantes del marisco, Vic Braseria,  el sitio perfecto para los más carnívoros y Come una Volta, ideal para los que vayan donde vayan, prefieren la comida italiana. 

Por la tarde

Después de disfrutar de una buena comida nos encaminamos, ahora sí, a la gran obra de Gaudí, La Sagrada Família. Una impresionante complejo arquitectónico que el maestro dejó inacabado y que se prevé su finalización en el 2026. 

En esa fecha, se cumplirán 150 años de construcción del templo expiatorio. El proyecto consta de 18 torres, la más alta de 172,5 metros. Es decir, la edificación más elevada de la ciudad, justo por debajo de la montaña de Montjuïc.

 Una vez acabada su construcción, faltarán añadir todos los elementos decorativos de esta majestuosa catedral.  

Tal y como Gaudí solía decir: “la recta es del hombre; la curva es de Dios”, por eso, y a modo de imitación de la naturaleza, no veremos una sola línea recta en el interior de la iglesia, las columnas imitan a los árboles y los elementos de la naturaleza se entrelazan en su propia estructura.

Selfie del día: En el atardecer o incluso de noche, las imágenes de La Sagrada Família y del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau son espectaculares, ya que están iluminadas y se ven más impactantes que durante el día. Sitúate en el parque anexo del templo expiatorio y de espaldas a ella haz la fotografía perfecta.

Para acabar el día, camina hacia el norte, en dirección a la montaña del Tibidabo hasta llegar al final de la Avenida Gaudí. Aquí encontrarás el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, construido por Lluís Domènech i Montaner y su hijo, una espectacular construcción declarada Patrimonio de la Humanidad en 1997.

Es un paseo de unos 15- 20 minutos andando en una cuesta, si prefieres puedes ir en metro hasta la estación de Sant Pau / Dos de Maig a una sola parada en la L5. 

En la último punto de la jornada recomendamos disfrutar de la zona que rodea este hospital porque es preciosa, llena de comercios, bares y mucha vida. 

Día 3: Ruta detox 

• Playas
• Rambla del Poblenou
• Ciutadella
• El Born
• Calle Blai

Por la mañana

Tras un par de días de visitas de museos, edificios y de ir corriendo de un lado para el otro, seguro que quieres desconectar y disfrutar la ciudad de una forma más pausada.  

Por eso, te proponemos hacerlo en una de las playas de Barcelona.

Tras preparar vuestra toalla, crema de sol y ropa de baño, ya puedes visitar la Barcelona más famosa, la playa. La atmósfera vibrante de la gente, los chiringuitos, el sol, la sangría y nadar en el agua refrescante es la experiencia más buscada por locales y turistas. 

Rodéate de grupos de amigos hablando y riendo, familias jugando con la arena o si prefieres ve a la playa nudista.

Hay tres playas en la Ciudad Condal, la Barceloneta, la playa de Llevant o la playa de Bogatell.

Para llegar a la playa de La Barceloneta, no tiene pérdida, ya que la parada del metro de la linea amarilla (L4) tiene el mismo nombre.

Las otras dos playas, también es en la línea del mismo color, pero ambas en la estación de Selva de Mar. Desde ahí, debes caminar unos 10-15 minutos, fíate de tus sentidos y sigue al resto de bañistas.

Tómate algo en cualquier chiringuito que hay en cada una de las playas, disfruta del sol, del agua y márchate cuando estés relajado y como nuevo. 

Otra opción es llevarte las bebidas y coger un tren de Cercanías Renfe (R1) desde Plaça Catalunya que te lleve a Montgat Nord, Masnou o Premià de Mar, y un poquito más lejos, la paradisíaca, Sant Pol de Mar.

En unos 30 minutos estarás en una playa muy cercana a la ciudad y mucho menos abarrotada.

Selfie del día: Sitúate bajo la escultura del pez de Frank Gehry en La Barceloneta y de espaldas a ella. Así tendrás de fondo, la playa  y uno de los edificios del skyline de la ciudad, el Hotel W de Barcelona. Te convertirás en el rey de Instagram por un día.

Dónde comer en el barrio de El Poblenou de Barcelona

La playa te energiza y te renueva, pero después de un largo rato al sol, el hambre aparece y es hora de buscar algún restaurante.

Por lo que te recomendamos ir al barrio del Poblenou, en concreto a la Rambla del Poblenou. 

Alguno de nuestros sitios favoritos para comer bien en esa avenida son el Xorus, ubicado en el número 105, y Isami en el número 88.

El primer restaurante es de gastronomía tradicionalmente catalana y el segundo, para los amantes de la comida asiática y de fusión. 

También añadimos a la lista de favoritos El Beertuós, situado en el Carrer del Joncar, 3, donde la larga lista de cervezas artesanas te hará pasar el sofoco de la playa mucho más rápido. 

Por la tarde

Después de descansar y la ducha en nuestro alojamiento turístico, nos desplazamos con el bus B20 o B25, o si prefieres el metro L1 hasta la parada de Arc de Triomf y caminar unos 7 minutos hasta llegar al Parque de la Ciutadella. 

Es un paseo corto, pero en el que siempre hay ambiente, malabaristas, y gente sentada en el césped, perfecto para ir con niños o con amigos, hacer un pícnic o alquilar una barquita en su lago. 

A 5 minutos a pie nos adentraremos en el barrio de El Born, sus callejuelas plagadas de fascinantes bares vintage y de sus plazoletas repletas de historias.

Para la cena, iremos al barrio de la esencia del tapeo barcelonés: el famoso Carrer Blai. 

Selfie del día: Si te encanta fotografiar la comida, incluso antes de probarla, la variedad de tapas y pintxos del Carrer Blai harán de tus deseos una realidad.

Con la línea de metro L3 llegaremos a Poble Sec en la parada homónima al barrio. A 200 metros se encuentra la famosa Blai y sus bares. En seguida verás a los barceloneses en la puerta de alguno, un arrollador sonido de vasos tintineantes y de risas del quien cena y tapea feliz.

Esta calle es fácilmente reconocible, sea invierno o verano.  

Día 4: Ruta mágica de Montjuïc 

• Castillo de Montjuïc
• Jardines de Miramar
• Jardines de Mossèn Costa i Llobera
• Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC)
• Fuente mágica de Montjuïc
• Avinguda del Paral·lel
• Mercat de Sant Antoni
• Park Güell
• El barrio de Gràcia

Por la mañana

En este último día hemos pensado en una ruta más tranquila y en la que ver un Barcelona distinta y histórica. 

Por eso, en el cuarto día nos vamos con la línea de metro L3 o L2 a la parada de metro de Paral·lel y subimos al funicular que nos lleva directamente a la cima de Montjuïc. 

Si prefieres también puedes llegar a la estación de los jardines de Miramar en la montaña de Montjuïc desde la parada de metro de la Barceloneta, (L4) y subir a la montaña con el teleférico del puerto

Este teleférico se eleva por encima de la ciudad y te permite ver Barcelona desde arriba. 

Hay varias estaciones y en cada una de ellas, parques, fuentes y un bonito paseo, muy recomendable en un día soleado.

Sugerimos subir a la cima y realizar una visita guiada al castillo de Montjuïc disponible en varios idiomas.

Después, bajamos a la ciudad, aprovecha para conocer los Jardines de Miramar, los Jardines de Mossèn Costa i Llobera, el Mirador del alcalde y el Camí del Mar.

Selfie de día: Las fotografías desde estas alturas son imponentes. Desde lo más alto del Castillo del Montjuïc, podrás hacer una fotografía al patio interior de la edificación, captando así, las diferentes tonalidades de verde de sus musgos, la profundidad y altura de sus muros.

Dónde comer cerca de Plaça Espanya

Hay quienes les gusta hacer un pequeño pícnic en los Jardines de Miramar y comer rodeados de su extensa zona arbolada.

Otros prefieren volver a Plaça Espanya, y adentrarse en el Museu Nacional d’Art de Catalunya y ver la fuente mágica de Montjuïc.

Si prefieres descansar y comer en un restaurante, entonces, recomendamos ir a la Avinguda Paral·lel. Desde Plaça Espanya son solo 15 minutos a pie, pero si te decides el metro, está a tan sólo una parada con la L3. 

Ya os hemos hablado sobre el carrer Blai y sus tapas, pero si quieres un restaurante de comida casera, está el bar Galicia en la Avinguda Paral·lel, 131 o el bar Borrell situado en la misma Avinguda Paral·lel en el número 84. En ambos tendrás una experiencia culinaria sencilla pero sabrosa. 

Por la tarde

Tras la comilona, tienes varias opciones en distintas direcciones, ya que estás localizado en un punto bastante céntrico del que desplazarte fácilmente. 

Si vamos hacia el centro de la ciudad, en el Carrer del Comte d’Urgell,1, a tan solo 10 minutos a pie, verás el conocido Mercat de Sant Antoni. Podrás pasear, tomar algo y comprar souvenirs.

Desde el mismo mercado nos vamos a Jaume I con el bus 120 y por segunda vez pisamos el barrio de El Born, pero ahora es el momento de un buen museo. 

Depende de tus preferencias y gustos puedes visitar el Museo Picasso, el Mercat de Santa Caterina, el Museo del Chocolate o el Palau de la Música Catalana.

Selfie del día: Si eliges la ruta de los museos, recomendamos una fotografía al interior del Palau de la Música Catalana, los colores y la formas de sus techos son impresionantes y harán de tus imágenes la envidia de tus seguidores.

La otra opción es dirigirse con la línea L3 del metro hasta Vallcarca e ir al Park Güell, donde caminar por los arcos y sentarse a observar el Park Güell te da una panorámica cautivadora. Compra tu entradas aquí. 

Desde la estación de Vallcarca caminamos unos 20 minutos por una cuesta pronunciada hasta la Avinguda del Santuari de Josep de la Muntanya para acceder por las escaleras mecánicas.

Ahora bien, existe un bus lanzadera desde la parada de Alfons X (L3) que te lleva directamente a la puerta del parque, así evitas la subida hasta la entrada. Recomendamos comprar con antelación el tiquet para evitar las filas al Park Güell en el siguiente enlace.

Te ahorrará tiempo, una extenuante caminata, y seguramente, perderse por el camino. 

 

Selfie del día:  Te recomendamos hacer una fotografía de gran angular sentado desde los bancos o desde los arcos en el mismo parque para captar la esencia de este increíble lugar.

La mejor manera de acabar la última noche es en el barrio de Gràcia. La zona más bohemia de la ciudad, lleno de bares, y un ambiente único de pueblecito en pleno centro de la ciudad. 

Esperamos que hayas disfrutado de las bellezas de la ciudad con esta ruta de 4 días en Barcelona.

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