El metro de Barcelona transporta una media de 400 millones de pasajeros al año, según datos del 2015. Con tanta afluencia de gente, lo más probable es que la mayoría de nosotros hayamos pasado más horas de las que querríamos viajando por el subsuelo de la ciudad. Tantas horas allí abajo, transbordando de linea en linea, y desconocemos por completo algunas historias insólitas que allí abajo han sucedido. Por ello, en este artículo de ShBarcelona queremos descubrirte algunas curiosidades del metro de Barcelona que tal vez no conozcas.
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Historias del metro
El primer convoy que circuló por Barcelona lo hizo en el año 1924, en el trayecto que une la plaza Lesseps con la estación de Liceu. Desde entonces, el metro de Barcelona ha sido el escenario de algunas historias que se han convertido en leyendas que han llegado hasta nuestros días. Después de conocer estas 5 curiosidades del metro de Barcelona que te descubrimos a continuación, tal vez viajes intentando ver alguna cosa sorprendente por la ventana o, quién sabe, quizá decidas dejar de viajar en suburbano y busques una forma alternativa de moverte por la ciudad. Esperamos no haberos asustado pero… ¿Creéis en los fantasmas?
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5 Curiosidad del metro de Barcelona que quizás no conozcas
En los primeros años del siglo XX, existían algunas paradas de metro que actualmente están en desuso, como la parada de Correos. Actualmente, todavía existen once de estas estaciones, conocidas popularmente como las estaciones fantasma. Las malas lenguas dicen que los convoyes tienen los vidrios tintados para que los viajeros no puedan ver las estaciones fantasma al pasar por ellas. Otros, en cambio, afirman que las ventanas son negras para evitar que los viajeros vean las almas que deambulan por los túneles. De hecho, algunos trabajadores afirman que han visto fantasmas en el metro de Barcelona.
Estas historias de fantasmas están respaldadas por dos hechos históricos que sucedieron en diversas estaciones en dos momentos distintos. La primera tiene que ver con una oleada inexplicable de suicidios que sucedió en los años 30 en la estación de Rocafort de la linea 1. Desde entonces, ningún operario quiere trabajar en Rocafort pasada la medianoche, pues en diversas ocasiones se han visto personas caminando por las vías a través las cámaras de seguridad después de que pasara el último tren del día. La segunda está relacionada con el metrosurf, un juego que se puso de moda en los años 80 entre los jóvenes de todo el mundo. El metrosurf consistía en engancharse en la parte trasera del último vagón o subirse al techo del tren para surfear por los túneles. Varios jóvenes murieron practicando este juego en la estación de Cataluña. En la actualidad, varios trabajadores afirman haber visto formas extrañas enganchadas en los vagones en el punto exacto donde fallecieron los jóvenes.
Otra curiosidad que llena el subsuelo de Barcelona de misterio es la leyenda del viajero fantasma. En la linea 5, entre las estaciones de Sagrada Familia y Sant Pau -Dos de Maig, existe la estación fantasma Gaudí, una estación edificada en los años 60 y que nunca se llegó a utilizar. Se dice que, si miras por la ventana al pasar por la estación fantasma, podrás ver a un viajero sin rostro esperando el tren. Pero los misterios no terminan aquí. La última curiosidad que queremos destacar está relacionado con una leyenda urbana que nos habla del tren del inframundo. Este tren aparece todas las noches a los 12 en punto en la estación de plaza Cataluña de la linea 6 de los Ferrocarriles de la Generalidad de Cataluña. Esta linea, que une Cataluña con Reina Elisenda, fue la primera en inaugurase, antes que el metro, en el año 1863. La leyenda explica que, a la media noche, aparece un tren sin conductor ni pasajeros que va recogiendo a las almas con asuntos pendientes que no consiguieron pasar al más allá.
* Foto destacada de UT440131M vía Visual Hunt
Esta son algunas curiosidades del metro de Barcelona que tal vez no conocías. ¿Te atreves a comprobarlas?
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