Justo ahí, en ese escenario que tan entrañablemente definió Antonio Machado, encontramos las playas del Mediterráneo. Tradicionalmente territorio de pescadores, actualmente las playas de Barcelona y Cataluña se han convertido en los lugares más demandados durante el veraneo de visitantes y habitantes. Algunas veces podemos tener la sensación de que en la costa de Barcelona hay demasiada gente y no podemos disfrutar un día tranquilo de playa. Pues bien, las personas que tengan la suerte de haber alquilado un apartamento por días en Barcelona con ShBarcelona podrán disfrutar ahora de un recorrido alternativo por diferentes playas y calas no tan conocidas, pero que sin lugar a dudas constituyen verdaderos paraísos.
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Descubre las bondades de las playas catalanas
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Los 500 kilómetros de costa que tiene Cataluña dan como resultado playas de características bien diversas. La Barceloneta, San Sebastián, Bogatell o Montgat son de sobras conocidas para los barceloneses y para los turistas que visitan la ciudad. Sin embargo, viajando unos pocos minutos hacia el sur de Barcelona nos adentramos en la conocida Costa Dorada, cuyo nombre hace honor al color de sus arenas, pudiendo encontrar amplias playas como las de Castelldefels o, si seguimos avanzando, con verdaderos tesoros como la Cala del Garraf, la Cala del Faro en Vilanova i la Geltrú, las playas de Sitges, Calafell, Tarragona o Salou. Sin olvidar la Cala Fonda, más conocida como Waikiki, una playa naturista situada a pocos kilómetros de la ciudad de Tarragona, donde se puede disfrutar de un baño de barro, extraído de las paredes de la montaña que rodea la cala. Continuando más al Sur nos encontramos con el Delta del Ebro, donde destacan la Playa Chelín en Ametlla de Mar o la del Pont de l’Àlia en Perelló.
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Yendo hacia el Norte de la ciudad, a unos 50 kilómetros se encontrará en la famosa Costa Brava, donde tendrá la oportunidad de conocer algunas de los rincones más espectaculares de la costa mediterránea. Hágase ya con un piso en alquiler por días en Barcelona y organice una escapada. ¡No se arrepentirá! Ya en Blanes, primer pueblo de la provincia de Girona, encontrará la Cala Sant Francesc en Blanes, donde podrá pasar un día de playa inolvidable mientras come una paella en su chiringuito. Continuando por la carretera de la costa llegará a Tossa de Mar donde encontrará una playa rodeada de un macizo coronado por la Villa Medieval, y más adelante a Palamós, donde se encuentra Cala Estreta, una de las playas más bonitas y escondida, a la que sólo se puede llegar caminando por un bosque de pino durante 45 minutos o mediante barco. Es un lugar ideal para practicar esnórquel, pudiendo avistar peces y algunas variedades de coral rojo y amarillo. Port-Bo en Calella de Palafrugell, Gola de Ter en Torroella de Montgrí, Sant Pere Pescador o el recorrido que va desde Roses hasta el pueblo donde vivió Dalí, Cadaqués, son otros de los rincones maravillosos que no puede dejar de visitar.
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